Decididamente ridícula

Artículo extraído del blog «La Araña Peluda», el que desafortunadamente ya no es público. Sin embargo La Arañita accedió a compartir con nosotros algunas de sus brillantes notas. Esta trata sobre la novillera peruana Daisy Milagros. La que amenaza con regresar pronto al Perú convertida en toda una matarife o, lo que es peor, matadora de toros luego de «doctorarse» como tal en España.

Decididamente ridícula

«La siguiente imagen corresponde a la torera peruana, residente en España, Daisy Milagros. Sonríe complacida después de que un grotesco operario le haya amputado las orejas a un toro moribundo. Exhibe sin ningún pudor sus «trofeos» después de haber maltratado a un animal en una ceremonia ridícula. Obsérvese también como remueven la arena para que no quede ni rastro de la sangre de un animal que acaba de ser torturado y ejecutado. El mundo del toreo es así: se ufana raudo en ocultar su propia podredumbre. Su imagen debe aparecer siempre pulcra como la de una virgen y preñada de glamour.

¡¡¡OLEEEEEE!! Con dos trozos de carroña en cada mano y encima se ríe.

No deja de resultar sorprendente que en el Perú se promocione este tipo de matadero grotesco en lugar de promocionar el desarrollo. Perú es un país con un nivel cultural ínfimo y una renta per cápita también ínfima, con una diferencia notable entre clases. No es de extrañar que este espectáculo, basado en un narcisismo ególatra rayano en el delito puro y simple, triunfe en medio del subdesarrollo. En la siguiente imagen vemos a Daisy Milagros haciendo una pantomima delante de un animal que vomita sangre a borbotones. ¡Qué bello!

Obviamente, ella se cree guapa y fascinante. Una imagen vale más que mil palabras:

A lo mejor con un bigote mariachi resultaría más atractiva.

Otro detalle sorprendente es ver como el mundo del toreo hermana culturalmente a la humanidad. En la siguiente imagen podréis ver las banderas del Perú y Andalucía clavadas sobre el lomo de un toro. Ah, esos lazos de sangre.

¡Daisy Milagros mata como nadie!

Sólo con ver imágenes como esta, uno comprende que efectivamente, el toreo es una gran contribución española a la cultura de la humanidad. De la humanidad de Colombia, Ecuador, Perú y México, para ser exactos. Ningún otro país del mundo ha permitido jamás que esta barbarie disfrazada de «cultura» y «arte» se «celebre» en su territorio. No sé por qué será.

Aparte del toreo, a Daisy Milagros también le gusta la caza. Especialmente cuando se trata de matar animales por diversión. Su página personal está llena de hermosas escenas como esta:

No me imagino a una pija semejante cazando para obtener pieles o por la más simple supervivencia. No, sus colegas y ella lo hacen porque les gusta matar animales por diversión. En lugar de jugar al parchís, se dedican a vaciar cartuchos sobre los yermos campos todos los domingos por la mañana. Sobre los perros que les acompañan en estas «excursiones» mejor no hablar. En cuanto dejan de servir al propósito son ahorcados o sencillamente fusilados. Esos perros que se ganan el sustento con el sudor de su frente no disfrutan de la misma jubilación que nuestros animales domésticos. No: son vilmente ejecutados como un esclavo que ya no puede trabajar. ¿Para qué darle de comer entonces?

Toda esta mentalidad atávica es la que se desprende de los rasgos simiescos de esta torera. Para ella lo que único que vale es su propia fascinación, su mundo de fiestas, oropel, clarines, guindillas, vino fino y lentejuelas. Respeto por la vida, ninguno. Respeto por la civilización, menos. El mundo de estos matarifes infestos con los que desgraciadamente tenemos que convivir se basa sobre todo en lo que ocurre detrás del telón. Detrás de la «fiesta» siempre hay otra fiesta. Muchas entregas de premios y sobre todo, muchas comilonas en restaurantes con solera. Matar animales es tan sólo una excusa como cualquier otra para llevar una intensa vida social llena de glamour, contactos, influencias e idilios. Algún día conseguirá salir en el «Hola!»

Qué cara de buenos chicos. Lo que me pregunto es qué persona en sus cabales puede tener la cabeza de un ciervo colgada en la pared bajo dos escopetas. ¿Un tarao, por ejemplo?

Hummm! ¡Qué belleza sin par!»

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Es realmente vergonzoso para nosotros, los peruanos, que esta mujer sea compatriota nuestra. Ojalá se quede por España y no regrese al Perú nunca.

#LaCrueldadNoSeRegulaSeProhíbe
#PeleasDeGallosAbolición #TauroMafiaAbolición
#TodosLosAnimalesSienten

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